Yo me largo con la música a otra parte
y os dejo vuestros trágicos presagios.
Ser torpe no me obliga a ser cobarde
te buscaré entre los restos del naufragio,
para hablarte de un amor inmenso
que no por ello no pueda ser amable.
Hoy me ves derrotado e indefenso
Pero en mar abierta, soy inalcanzable.

Así que ven a jugar al sol sobre mi cubierta
y navegar las rutas preferidas,
atracaremos en aquella isla desierta,
para poder curar nuestras heridas.

Qué maravilla dejar al fin Europa,
abandonada en su lecho de muerte
verla desaparecer allá por popa
derramar el ron y desearnos buena suerte.

Y olvidar, olvidar, olvidar, que allí crecimos
al comenzar esta vida de piratas.
Aún recuerdo la tarde en que de niños,
te tracé este plan sobre unos mapas.

Así que ven a jugar al sol sobre mi cubierta
y navegar las rutas preferidas,
atracaremos en aquella isla desierta,
para poder curar nuestras heridas.

Así que ven a jugar al sol sobre mi cubierta,
atracaremos en aquella isla desierta...